MENSAJE A LOS OBISPOS Y EL PUEBLO DE DIOS DE BAHÍA BLANCA
Queridos hermanos en Cristo,
Mons. Carlos A. AZPIROZ COSTA
y Mons. Pedro E. FOURNAU,
junto a todo el Pueblo de Dios
en Bahía Blanca:
Desde la Diócesis de Avellaneda-Lanús, en comunión fraterna y con profundo dolor, nos dirigimos a ustedes en estos momentos de angustia y preocupación. Acabamos de celebrar la Eucaristía en la Catedral en la fiesta de nuestra querida Mama Antula, y hemos elevado nuestras oraciones por cada uno de ustedes, por los que sufren, por los que han perdido a sus seres queridos y por todos los que están brindando ayuda en medio de una situación tan difícil.
El trágico temporal que ha azotado Bahía Blanca nos llena de consternación. Sabemos del dolor que provoca la pérdida de vidas, la devastación de hogares y la evacuación de tantas familias. En estos momentos de prueba, queremos hacerles llegar nuestro abrazo fraterno y nuestra cercanía en la fe. Nos unimos a ustedes en la esperanza cristiana que, aún en medio de la tormenta, nos recuerda que Dios camina con su pueblo y nunca lo abandona.
Valoramos y agradecemos la entrega de quienes, en este tiempo de emergencia, se convierten en instrumentos de la providencia divina: voluntarios, bomberos, personal de salud, fuerzas de seguridad, así como también servidores de Cáritas, sacerdotes, religiosas, y cada hermano que, con generosidad, extiende su mano para sostener al que sufre. En ellos vemos reflejado el rostro misericordioso del Padre.
Desde nuestra Diócesis, ponemos a disposición nuestra oración constante y, en la medida de nuestras posibilidades, nuestro compromiso solidario con ustedes a través de Caritas Nacional.
Los confiamos a la intercesión de la Virgen Santísima, Nuestra Señora de la Merced, y pedimos a Dios que les conceda fortaleza y consuelo en este tiempo de prueba.
En nombre de la Iglesia que peregrina en Avellaneda-Lanús los saludo con fraternal afecto en Cristo Jesús.
Padre Obispo Marcelo (Maxi) Margni
Obispo de Avellaneda-Lanús
Avellaneda-Lanús, 7 de marzo de 2025