El Papa Francisco anunció este domingo 6 de octubre la designación como Cardenal de Mons. Vicente Bokalic, Arzobispo de Santiago del Estero y primado de la Argentina, nacido en Lanús y exalumno del colegio parroquial de San José de Pompeo.
Leé a continuación el mensaje de nuestro Padre Obispo Marcelo (Maxi) Margni a toda la Diócesis.
ALEGRÍA POR LA DESIGNACIÓN
DE MONS. VICENTE BOKALIC IGLIC COMO CARDENAL
Querida comunidad diocesana:
Con profunda alegría, les escribo en este día en que el Papa Francisco, al término de la oración del Angelus, ha anunciado la creación de nuevos cardenales y, entre ellos, Mons. Vicente Bokalic Iglic, Arzobispo de Santiago del Estero y Primado de la Argentina[1].
Como muchos seguramente saben, Mons. Bokalic nació en nuestra ciudad de Lanús, hijo de inmigrantes eslovenos, en 1952, y fue alumno del colegio parroquial de San José de Pompeo, también en Lanús, antes de continuar sus estudios secundarios en Escobar e ingresar finalmente en la Congregación de la Misión (Vicentinos). Desempeñó diversos servicios en su Congregación, hasta ser designado Obispo auxiliar de Buenos Aires, en 2010, y luego Obispo de Santiago del Estero, elevada a Arquidiócesis e Iglesia primada de la Argentina por el Papa Francisco en septiembre de este año.
De algún modo, entonces, los inicios del camino vocacional de Mons. Bokalic están unidos al camino de nuestra Iglesia peregrina en Avellaneda-Lanús, y nos alegra profundamente que el Santo Padre haya querido ahora contarlo entre sus colaboradores más cercanos, el Colegio de Cardenales.
El Consistorio para la creación de los nuevos Cardenales tendrá lugar en Roma el próximo 8 de diciembre, pero ya desde ahora nos unimos a la alegría de la Iglesia peregrina en Santiago del Estero y rezamos por Mons. Vicente Bokalic Iglic, para que el Señor Jesús, nuestro buen Pastor, le conceda su fortaleza, su sabiduría y su paz en este nuevo servicio a la Iglesia universal.
Reciban mi saludo y mi bendición.
Padre Obispo Maxi Margni
Obispo de Avellaneda-Lanús
Avellaneda, domingo 6 de octubre de 2024.
[1] El texto completo del mensaje puede leerse en: www.vatican.va.