MENSAJE CON OCASIÓN DEL DOMINGO DE LA PALABRA DE DIOS
“Espero en tu Palabra” (Salmo 119)
Querida comunidad diocesana:
El próximo 26 de enero nos encontrará celebrando una vez más el Domingo de laPal abra de Dios, instituido en 2019 por el Papa Francisco[1].
Si bien es cierto que en nuestra región, debido al tiempo de vacaciones de verano, las iniciativas especiales en torno a la Palabra suelen darse sobre todo en el mes de septiembre – donde tenemos una consolidada tradición de la Iglesia en Argentina respecto al “Mes de la Biblia” -, no quisiera dejar de señalar esta ocasión significativa, esperando que este domingo pueda ser, de algún modo, un primer impulso del año en el esfuerzo de poner la Palabra de Dios cada vez más en el centro de la vida de nuestras comunidades. Después de todo, si nos estamos proponiendo fortalecer y revitalizar las comunidades parroquiales, ¿hay algo que pueda darnos más fuerza y más impulso de renovación que el Evangelio vivido, celebrado y anunciado?[2] Este es el camino que la Iglesia, sobre todo desde el Concilio Vaticano II y el magisterio sucesivo de los Papas, nos viene señalando. Este es el camino que también como Iglesia diocesana siento que estamos llamados a recorrer.
Quisiera también recordarles que vivimos este Domingo de la Palabra de Dios en el contexto del Año Santo. Por esta razón, el lema de este año es: “Espero en tu Palabra” (Salmo 119, 74). Este breve versículo del salmo, elegido por el Papa Francisco, nos habla de un grito de esperanza: el hombre, en el momento de angustia, de la tribulación, del sin sentido, grita a Dios y pone toda su esperanza en Él. En nuestro tiempo, tan necesitado de esperanza, nos hará bien encontrar en la Palabra de Dios las razones para reavivarla, como nos proponía Francisco al convoca el Jubileo[3]. Aprovechemos, tanto en esta ocasión como en el mes de septiembre, las diversas iniciativas que con creatividad podamos realizar en las comunidades, así como también los subsidios que oportunamente puedan ofrecer el Dicasterio para la Evangelización, el Departamento Nacional para la Animación y Pastoral Bíblica, y nuestro Servicio Diocesano de Pastoral Bíblica.
En este contexto quiero también compartir con ustedes una noticia, que es motivo de alegría para nuestra comunidad diocesana. En el marco del Domingo de la Palabra de Dios, Agustín Álvarez – un laico de nuestra diócesis de Avellaneda-Lanús – será instituido por el Papa Francisco en el ministerio del lectorado, en una celebración que el mismo Santo Padre presidirá en la Basílica de San Pedro. Agustín se encuentra desde hace algunos años profundizando sus estudios en Roma, donde acaba de terminar la licenciatura y se apronta a comenzar el doctorado en el Pontificio Instituto Bíblico, caracterizándose por su profundidad y su calidad como estudioso y como servidor de la Palabra.
Ahora, al ser instituido en el ministerio laical del lectorado, en virtud del sacerdocio bautismal común a todos los fieles y para el servicio a la comunidad[4], recibirá también la misión de “trasmitir fielmente la Palabra de Dios, para que sea cada día más viva y eficaz en el corazón de los hombres”[5]. Ese eco de la Palabra se le encomienda de modo especial al lector instituido para que pueda hacerlo primariamente en la asamblea litúrgica, proclamando las lecturas (excepto el Evangelio) o preparando a otros para que lo hagan convenientemente, y también acompañando a sus hermanos en la formación en la fe[6].
Como Iglesia diocesana rezamos por Agustín y nos unimos espiritualmente, con mucha alegría, a esta celebración que presidirá nuestro querido Papa Francisco. Con corazón esperanzado, rezo también para que pueda ser el inicio de un nuevo tiempo de ministerialidad laical en nuestras comunidades.
Me gustaría aprovechar la oportunidad para agradecer al Padre Juan Molina, quien también está estudiando en el Pontificio Instituto Bíblico el segundo año de licenciatura, para luego colaborar en nuestra diócesis en la renovación de la formación de los agentes de pastoral, en vistas a la revitalización de nuestras comunidades.
Queridos hermanos y hermanas, que la Virgen María, Mujer de la Palabra y Madre de la Esperanza, interceda para que nuestras comunidades cristianas puedan renovarse a la luz de la Palabra de Dios. Con este anhelo los saludo y los bendigo de corazón,
Padre Obispo Marcelo (Maxi) Margni
Obispo de Avellaneda-Lanús
Avellaneda-Lanús, 13 de enero de 2025.
[1] Papa Francisco, Carta apostólica “Aperuit illis” con la que se instituye el Domingo de la Palabra de Dios, 30 de septiembre de 2019.
[2] Carta pastoral Orientaciones pastorales para nuestra Iglesia en camino, 28 de mayo de 2023.
[3] Papa Francisco; Bula “Spes non confundit” con la que se convoca el Jubileo Ordinario del año 2025.
[4] Carta del Santo Padre Francisco al Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe sobre los ministerios del lectorado y el acolitado; 11 de enero de 2021.
[5] Pontifical Romano; Ritual para la institución de lectores y acólitos.
[6] Cfr. Pablo VI; Carta Apostólica “Ministeria Quaedam”; 15 de agosto de 1972.